Nicolás Lupiañez: “Somos la más friki de las librerías convencionales y la menos friki de las librerías frikis”
Nicolás Lupiañez Antequera, propietario de la Librería Flash, nos recibe a primera hora de la mañana. Nos lo encontramos sentado en la entrada, enfrente del ordenador, trabajando como cada día. Aprovechando estos minutos de tranquilidad en la tienda comenzamos la entrevista. Sin embargo, en la tercera pregunta, algunos lectores comienzan a asomar su cabeza por el lugar, en busca de algún ejemplar ansiado.
La historia de Nicolás entre tebeos comienza con su primo en una tienda muy peculiar llamada Krisis. Trabajan con discos, libros y cómics. Su pasión desde siempre eran los tebeos, la ciencia ficción y la fantasía, así que cuando los primos se separaron, decidió abrir la Librería Flash, ya que “no hay nada mejor que trabajar en algo que te gusta”.
El seis de marzo se cumplen 30 años de dedicación a su tienda. Durante 15 años estuvo en la plaza de la Trinidad, esquina con calle Mesones. Sin embargo, la genuina, la originaria, la de toda la vida, siempre ha sido la tienda de San Antón.
¿Es difícil tener y mantener un negocio así en Granada?
Complicado, muy complicado. Cuando hay cualquier crisis, y en estos 30 años hemos tenido varías de ellas, lo primero que se reduce es la cultura en general, no solamente los libros: la música, el teatro, el cine… En fin, como cualquier negocio que lleve 30 años y se dedique a algo que tenga que ver con cultura, seguramente habrá pasado por distintas fases. Siempre, si hay que reducir en algo, se reduce en cultura.
Si hay crisis, si la gente no tiene para comer, tampoco tendrán para comprar un libro. Se nota en las ventas. ¿Quién no tiene un cuñado exótico que le guste comprarse libros? [risas]. Que te los prestan, pues bien; que no, pues tendrás que comprarlos tú si te gustan y si te lo puedes permitir.
¿Cómo se seleccionan los cómics en Librería Flash? ¿Son las editoriales o distribuidoras las que se ofrecen?
No se seleccionan, normalmente hay un servicio de novedad que mandan las editoriales. Luego yo selecciono lo que me quedo, lo que no me interesa y lo que no se ha vendido se devuelve. Todo lo que tengo en la galería, de stock, es porque a mí me interesa tenerlo, ahí sí hago selección
¿Cómo describiría el día a día en su trabajo?
Esto es un trabajo. Hay gente que me ha dicho que si tuviera dinero, lo que haría sería montar una librería para estar todo el día leyendo. Yo leo mucho, pero lo hago fuera de horario de trabajo. Esto es como estar en una gestoría o en una zapatería, ¿cómo vas a leer en horario de trabajo? Hay que recepcionar paquetería, preparar devoluciones, colocar escaparate, llevar gestión contable y, por supuesto, atender. Entonces no hay tiempo para leer en el trabajo.
¿Qué tendencias o tipo de literatura se vende más?
La novedad es lo que vende, básicamente. Somos una librería atípica, somos la más friki de las librerías convencionales y la menos friki de las librerías frikis. No hay un autor concreto que se venda con más frecuencia. Cuando sale uno de Almudena Grandes, se vende. Que hay uno nuevo de Arturo Pérez Reverte, pues también. Vendemos mucho tebeos, literatura de género, ciencia ficción, fantasía, terror y de rol; en eso sí que estamos especializados.
¿Qué se suele vender más: cómics manga, europeo, americano?
Según los lectores. Los adolescentes suelen comprar más manga. Los no tan adolescentes compran más de superhéroes, de Marvel especialmente. Y un popurrí variado compra más el europeo. Los jóvenes, jóvenes, manga. Los menos jóvenes, superhéroes. Y los más talluditos, varieté, que se llama. [risas].
¿Hay apuestas seguras, algo de algún autor que se sepa que se va a vender seguro?
Te puedo hablar de George R. R. Martin, Orson Scott Card o Patrick Rothfuss. Son algunos de los autores que llevo vendiendo años. Vendo, repongo, vendo, repongo… y así.
¿Y la franja de edad o tipos de compradores?
Hay de todo tipo de lectores, de todas las edades. Yo, gracias a dios, puedo decir que tengo una librería ecléctica en cuanto a su público. Tenemos desde un psicólogo a un mecánico de motos, catedráticos, policías, un inspector de policías, un repartidor de butano, funcionarios, empresarios, periodistas [risas mientras me señala a mí], incluso tenemos a varios periodistas [más risas].
¿Cuál sería su manga favorito?
Eso es muy complicado. Pídeme que te diga mis diez mangas favoritos; uno no puedo decirte.
¿Y alguno imprescindible?
¿Imprescindibles? [pausa breve] Depende del escenario en el que se enfoque. Por ejemplo, del género histórico me encanta ‘El lobo solitario y su cachorro’. En cuanto a fantasía, el clásico de ‘Akira’, ciencia ficción maravillosa. Y de los costumbristas, Jirō Taniguchi es uno de mis autores preferidos. Según qué onda me preguntes te puedo dar una respuesta u otra, no hay un manga favorito, dentro de cada estilo te puedo ir desglosando. Un día te vienes, y sentada con más tiempo [risas], te voy diciendo 40 o 50 básicos [más risas].
Para terminar, ¿le gustaría añadir algo más?
Por mi parte nada más. Me encanten que me entrevisten jóvenes periodistas [risas], y gracias.
El tiempo con Nicolás se pasa volando, y el ambiente de la tienda no te invita nunca a marcharte. La entrevista culmina con una agradable sensación por mi parte, y es que nunca te acostarás sin haber aprendido algo nuevo, como que debes intentar trabajar en algo que te gusta y que nadie puede tener un único manga favorito.