Danza Invisible sigue joven después de 30 años
El pasado viernes, 2 de febrero, Granada pudo disfrutar de una sesión de adrenalina y diversión. Una larga cola se formaba dos horas antes del evento y desde minutos previos al concierto se pudo sentir una mezcla de nostalgia y fervor entre todos los presentes.
El grupo malagueño Danza Invisible, con su largo recorrido musical y cuya música nos recuerda a la de otras bandas de la época como Simple Minds, U2 o The Police, reunió a la generación que vivió la Movida Madrileña en todo su esplendor y canciones como “Agua sin sueño”, “Sabor de amor” y “Sin aliento” fueron las más coreadas por el público.
Javier Ojeda, vocalista , se mostró muy cercano, bajando del escenario para compartir con sus fans algunas de sus canciones. Junto con Chris Navas, Manolo Rubio y el resto de integrantes del grupo, Danza Invisible dio un espectáculo que consiguió hacer bailar y cantar a toda una ola de emoción.
Los 80 volvieron a invadir una de las salas más emblemáticas del centro de la ciudad, recordando a las nuevas generaciones que la juventud es solo una forma de vida. Así, dieron fin al concierto dejándonos en los labios de fresa un sabor de amor… ¡y Rock & Roll!