WandaVision: de ser única a ser monótona
Ya acabada la serie, ahora toca hablar de manera general de WandaVision, de todo este viaje con un estreno semanal cada viernes.
A lo largo de estos doce años de la existencia del universo cinematográfico de Marvel, se veía difícil que ofrecieran algo al nivel de las dos últimas entregas de los Vengadores. Con el cierre de Infinity War y Endgame, la compañía se hizo con el juego, dejando el listón alto con la continuidad. Han logrado a lo largo de los años grandes niveles de recaudación. Nada más y menos, Avengers Endgame es la película más taquillera de la historia. También destacar lo bien favorecida que ha sido por parte de la crítica. Es cierto que no todas las pelis son buenas, pero la mayoría lo son, con un concepto fascinante.
Consigue crear un universo interrelacionado de pelis. Algo totalmente arriesgado. Han apostado por la creación de un árbol con diferentes ramas. Cuyas ramas compuestas por todos los personajes mostrados hasta ahora, obligando a la audiencia tener que ver todas las cintas. Como si se tratara de ver una serie. El espectáculo es el factor estrella, y ver míticos comics plasmados en la gran pantalla se hacen disfrutar de más. Una estrategia comercial potente, con una apuesta fuerte. Un logro que tiene su mérito y un reconocimiento merecido.
El proyecto mas insólito
Con Endgame parecía que tocaban su fin, pero no. El proyecto que ha empezado la fase 4 ha sido WandaVision. De primeras, resaltar que el concepto mola. Optan por la creación de un metalenguaje entre sus personajes protagonistas. Elizabeth Olsen y Paul Bettany están que se salen. Ya no solo eso, también es de admirar la referencia a otros productos televisivos. El adaptar la estética de una sitcom de cada década, en todos los sentidos hace que sea lo más interesante. Todo eso mezclado con el misterio, el suspense y la realidad como ciencia ficción bastante potente. A pesar de eso, los dos últimos capítulos son un bajón, ya que recurren a la monotonía de la acción de Marvel.
No es la única sensación agridulce. También por cómo ha jugado WandaVision con los fans. Al final el Quicksilver de Evan Peters era un troleo. Era un vecino más de Westview. Se abría un rayo de esperanza a los universos paralelos. De hecho, Wanda se sigue considerando una evolucionada. Cuando es una mutante y es nada más y nada menos que la hija de Magneto. Con la adquisición de Fox no tendría que haber problema de usar el término mutante.
Un final muy Marvel
Sobre el último capítulo, se lo cargan un poco. Es cierto que Marvel sigue una fórmula, pero no por eso tiene que acabar todo con peleas. De hecho, si la serie no hubiera recurrido a ella, no se habría echado de menos. Incluso, por primera vez, en la historia de Marvel, la acción se siente vacía, no tiene nada de especial. Al final Agnes fue la villana de la serie, no Mephisto. Funciona bien el trabajo de la actriz Kathryn Hahn. Su actuación es divertida y le da mucho juego al personaje. Se nota la influencia de las comedias en las que ha trabajado. Por otro lado, habrá que esperar a Capitana Marvel 2 para ver a Monica con sus poderes más desarrollados.
Por último, la escena post créditos, donde sale un skrull, nos pueden dar pistas del próximo gran evento. El próximo gran crossover tanto en cine y series sería Invasión Secreta. Evento en el que los skrull se harán pasar por superhéroes.
En general, una serie notable que será pieza clave de cara al futuro de los próximos proyectos del UCM. Pudo ser un proyecto único, pero opto por lo de siempre. El superhéroe contra el villano. Quien iba a decir que, por primera vez, la acción es lo que menos está gustando, tanto a la crítica y a la audiencia, siendo el espectáculo lo que atrae de Marvel.
Calificación para WandaVision: 8’6